Como me temo que este tema dará para mucho, pues eso, que a partir de hoy queda inaugurada oficialmente la sección - EL CAMPO Y LA MADRE QUE ME PARIO … ¿EN QUÉ HORA SE ME OCURRIRÍA? –
…. Hace algún tiempo… (dos años y medio) que decidí ser “promotora urbanística”.¡Justo en el mejor momento!, ahora que la construcción caía en picado.
Por supuesto los fines que perseguía eran “especulativos, meramente especulativos” y por eso elegí exactamente este momento.
Este era mí frió, calculado y especulativo plan:
Comprar un terrenito donde poder construir una casita y que mi familia pudiera disfrutar de la vida campestre; con su huertecito y su alberquita; haciéndole de paso más ligerita la jubilación a mi madre quitándole de en medio al plasta recién jubilado, mi padre. (Nótese que todo va en diminutivo: casita, terrenito, huertecito… indicador incuestionable de mis cortas aspiraciones)
Mi intención era aprovechar mi experiencia en el mundo de la construcción y de la administración para poder ahorrar unos miles de euros. ¡JA!
Dos años llevan parados los papeles en el EXCMO. AYUNTAMIENTO pendientes de una firma; bueno para ser exactos, la firma -último trámite- sólo falta desde hace unos ocho o nueve meses, el resto del tiempo transcurrido se ha perdido en trámites y más trámites sin mucha consistencia. Y sigue contando….
Lo tengo bien empleado, mira que yo me conozco y sabía que a mi no funciona nunca “el planear”, lo mío es más “a salto de mata”, “aquí te pillo, aquí te mato”…
Resultado: pues al día de hoy tengo un terreno sin casa, sin un puñetero árbol que de sombra, sin agua y… ¡sin papeles!, eso si, tengo una hipoteca hasta el 2037 y un padre que ha dejado de dar el coñazo a mi madre para dármelo a mi por mi incompetencia, ineficacia e inoperancia.
Y yo que en mi sueños me veía cual Scarlett O'Hara al atardecer murmurando… Tara, Tara,… la tierra roja de Tara…
